| ||||||||||||||||||||||
Como siempre, ya lo saben mis amables lectores, suelo introducir en mis comentarios el testimonio de mis propias experiencias personales. Y esta vez no será menos. Por eso, permítanme decir que yo soy un hombre de radio. A la radio le debo buena parte lo que soy y de lo que he conseguido a lo largo ya de mi amplia y dilatada vida.
Partamos de la base que no tengo ninguna vinculación profesional con la cadena de radio que antiguamente se denominaba Radio Popular.
Sumamente es asombroso el avance tecnológico que constantemente vivimos explorando, la comunicación actual es de elegancia esplendorosa, penosamente gran cantidad de la población desperdicia la oportunidad de enriquecerse dulcemente en conocimientos, son abundantes las opciones que tenemos para compartir ideas y cómodamente lo podemos hacer desde cualquier lugar del mundo.
Desde pequeño yo estaba tan enamorado de la radio que estaba deseando jubilarme para dar rienda suelta a mis deseos de comunicarme a través de las ondas. Por eso llevo ya un montón de años en los que la radiofonía da sentido a mi vida.
|