Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Opinión
Etiquetas | Normalidad | Comunidad | Contagio

Rastreadores

Contarán fallecidos hasta con los dedos si es necesario. Y podrían utilizar cuestionarios fiables, transparentes, no sobre voto, sino buscando causas
Nieves Fernández
miércoles, 27 de mayo de 2020, 08:26 h (CET)

Un especialista, de los muchos especialistas que hay en pandemias de pantalla, dicho sin acritud, decía en ámbitos europeos, que lo importante ahora, al haber más tiempo, quizá más recursos, menos prisas, o más sanitarios en activo por la merma del contagio, es que ha llegado el tiempo de los rastreadores.

Me parece que muy atrás, a años luz, quedaron los especialistas de las mascarillas, del papel higiénico, del tutor de lavado de manos, del pan artesano…

Un nuevo oficio llega. Nuevo título que viene a ayudar a la sociedad cuando lo necesita. Dudé si se lo apropiaría la FP, la Formación Profesional nuestra tan socorrida, nunca mejor dicho. Esa FP que cuida a dependientes y mayores y no les dejan ni llamarse personal sanitario, porque hasta el nombre del título de los dos años estudiados lo cambiaron al vaivén de ley educativa; y eso cuando las personas a las que cuidan son siempre las mismas: mayores, dependientes y diversos funcionales. Es la misma FP, ¿o no?, que ya está abriendo en la Europa de las normas las aulas para continuar la formación, quizá de rastreadores.

Parece que no es nuevo el oficio, aunque nos suene a buscador online de seguros y a perros olfativos; seguros sí, que podríamos necesitar ahora.

Escucho a un rastreador decir que trabaja en ello en la pandemia, desconozco su formación, pero sí que se pasa el día al lado del teléfono atando cabos, siguiendo pistas, adivinando, lanzando hipótesis, preguntando, midiendo datos, todo con tal de llegar al pequeño salero común de restaurante como causante de contagio.

Sí, esos detalles suenan más a Sherlock Holmes, Conan Doyle, Agatha Christie, Hércules Poirot, Vázquez Montalbán o Pepe Carvalho. Pero dejando la ficción, esa que siempre se deja superar por la realidad, los rastreadores del año 20 del siglo XXI tienen una gran labor por delante.

Cuando las fases empiezan a subir de nº, los rastreadores igual que los coordinadores y vigilantes de playa, no los de evitar ahogos, sino los de medir distancias entre neveras y toallas, se preparan para nuevos contratos.

Nuevos empleos para la normalidad, nos iremos acostumbrando. Mi comunidad contratará en breve, si no lo ha hecho ya, a cuatrocientos rastreadores, miren por dónde serán rastreadoras, creo que enfermeras, ¡por si tenían poco!

Pero, bueno, estoy segura que seguirán la pista del contagio, igual que defendieron la vida de cientos de miles de personas.

Dudo si contrataré vacaciones así, o iré a un cumpleaños, pero quedo tranquila, sabiendo que habrá rastreadoras buscando la pista de cómo se contagiaron los familiares, compañeros, vecinos y amigos que me faltan, incluso nos dirán si lo estamos ahora. Contarán fallecidos hasta con los dedos si es necesario. Y podrían utilizar cuestionarios fiables, transparentes, no sobre voto, sino buscando causas y contagios. Vendría bien antes de que busquemos terrazas y hoteles, incluso antes de visitar a familiares de cerca o de lejos con el miedo en el cuerpo.

Noticias relacionadas

Dicen, y estoy de acuerdo, que el centro es un terreno peligroso electoralmente hablando, y pienso que esto es una realidad, ya que en poco tiempo hemos sido testigos de la debacle de muchos partidos que han apostado por esa posición. También he oído eso de que ser de centro es como todo el mundo dice que se tiene que ser, pero como a nadie le gusta que seas, y también puedo estar de acuerdo.

Ahondando en el pasado de la humanidad, podemos comprobar cómo, desde siempre, las distintas civilizaciones han vivido en la esperanza de otra vida después de la muerte. Por ello han procurado ofrecer a sus difuntos un habitad confortable, al que han rodeado de ese “ajuar” consistente en armas, alimentos, animales de compañía, joyas, ropajes, etc., que les hiciera más llevadero el paso por la “otra vida”.

Blaise Pascal, físico y filósofo francés del siglo XVII, escribe: “Todos los problemas de la humanidad provienen de la incapacidad del hombre de sentarse tranquilamente solo en una habitación”. ¿Qué hará una persona encerrada sola en una habitación? Se sumergirá en sus pensamientos erróneos porque no sabe pensar correctamente y se dejará llevar por las ilusiones de su propia bondad y de la perversidad del resto de los mortales.

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© 2025 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© 2025 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto