Justo ahora se cumplen cuatro años desde que el mundo fue conocedor de las desafortunadas atrocidades perpetradas sobre la población homosexual de Chechenia. Dos purgas, la primera en 2017 y la segunda a finales de 2018, donde se torturaron, maltrataron e incluso mataron a culpables simplemente por ser gais.
En este nuevo vídeo quiero compartir con vosotros todo lo que desde nuestro país, a través del Ministerio de Exteriores y con su representación en organizaciones internacionales como la O.N.U o la O.S.C.E, se ha hecho durante todo este tiempo para denunciar esta inverosímil situación en los tiempos que corren. ¡No te lo pierdas!
Como todo el mundo conoce, en nuestro precioso idioma español, el apellido del presidente de los EE.UU. de América, se pronuncia “tramp”. En esencia, la “u” se convierte en “a”, y todos tan contentos: o tan disgustados ¡qué más da! Esta circunstancia lingüística me viene como anillo al dedo para lo que a continuación voy a explicar, con todas sus letras.
Cada día veo más necesaria la puesta en práctica de la moraleja que se desprende de esta fábula.Sabemos que las fábulas son dichos cortos que pretenden transmitir una enseñanza moral, basándose en actos y actitudes de los animales fácilmente asimilables a los seres humanos. En este caso el fabulista escenificaba las vicisitudes de dos burros que se encontraban atados entre sí.
La corrupción es una enfermedad endémica en la humanidad. El virus de la dolencia se inoculó en el momento en que Adán, el primer hombre de quien todos procedemos, comió el fruto del árbol que el Creador le había prohibido comer. Su desobediencia se conoce como pecado. Como el pulpo, tiene muchos tentáculos. Uno de ellos es la corrupción que nos saca de quicio.