Una de las razones en auge para viajar al extranjero es la posibilidad de someterse a un tratamiento de fertilidad. En la actualidad, el 11%1 de los ciclos de tratamiento realizados en España en el sector de la reproducción asistida ya corresponden a pacientes internacionales, ascendiendo a un total de 22.000. Ya sea en relación con la fecundación in vitro (FIV) o con la inseminación artificial, los países de los que proceden habitualmente estas pacientes son Reino Unido, Francia, Alemania e Italia. Todos ellos encabezan también el listado de países cuyos ciudadanos realizan más viajes a nuestro país.
La Navidad, por ejemplo, es uno de los momentos del año en que más desplazamientos internacionales se realizan. En concreto, diciembre y enero son los meses del año en que más se incrementan los trayectos procedentes de otros países por diferentes razones. Tal y como describe el Dr. Joaquín Llácer, director médico de Ginefiv, el objetivo de los viajes para someterse a un tratamiento de fertilidad es dar solución a las dificultades reproductivas que no gozan de una cobertura tan amplia en el extranjero como en nuestro país”.
En este sentido, la procedencia de la mayoría de las pacientes internacionales de Ginefiv concuerda tanto con los datos globales de la Sociedad Española de Fertilidad (SEF)ç1, como con el análisis estatal de los movimientos turísticos transfronterizos. “Nuestras pacientes extranjeras vienen de Reino Unido, Francia, Alemania e Italia principalmente”, detalla el Dr. Llácer.
Por qué España es un destino idóneo para los tratamientos de reproducción asistida
Tal y como señalan algunas pacientes de Ginefiv que residen en el extranjero, “entre los motivos más habituales para emprender estos trayectos y elegir España como destino se encuentran la excesiva longitud de las listas de espera en sus países de origen, la búsqueda de mejor calidad en los tratamientos, tras haberse sometido anteriormente a otros procedimientos fallidos, y los vetos legales según los condicionantes y requisitos de cada jurisdicción, en función del estado civil y las circunstancias sentimentales de cada persona”.
Así, los tratamientos más solicitados por las pacientes internacionales son las fecundaciones in vitro con óvulos donados (en Ginefiv suponen un 30% de los ciclos de este tipo realizados). Por su parte, la FIV con ovocitos propios representa un 10% del total de estos procedimientos en este grupo de clínicas. “Aunque nuestros centros no están especializados en la atención a pacientes internacionales, en los últimos 3 años hemos observado que el número de personas extranjeras con otro país de residencia a las que hemos atendido se ha duplicado”, señala el director médico del grupo de clínicas.
“Lo que queremos es poder cumplir nuestro deseo de ser madres sin que las largas listas de espera que hay en países como Francia y que dilatan el tiempo entre tratamientos, o las trabas legales sobre la edad máxima para someterse a ciertas técnicas, nos lo impidan”, expresan varias pacientes internacionales de Ginefiv. “Para conseguirlo buscamos calidad asistencial y resultados, algo que los profesionales españoles, con su alta especialización, formación y una situación legislativa más flexible, pueden ofrecernos”, concluyen.
Además, “el 30% de las pacientes internacionales de Ginefiv son mujeres solteras y parejas homosexuales. Entre ellas, los tratamientos más solicitados son la FIV con ovocitos propios (que supone el 50% de los procedimientos realizados por nuestros especialistas a pacientes en esta situación personal) y con óvulos donados (el 50% restante)”, explica el Dr. Llácer. Y es que muchos países aún no permiten acceder a estos grupos de población a las técnicas de reproducción asistida. Entre ellas, la ovodonación es la única opción para muchas mujeres que esperan lograr su sueño de tener hijos. Una ilusión que, durante diciembre y enero, puede cumplirse para muchas extranjeras que emprendan uno de los viajes más importantes de su vida a España, un país donde empezar su propio modelo de familia.
|