Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Opinión
Etiquetas | Artículo opinión

El Manicomio Nacional

La nueva legislatura se ha iniciado de la forma más pintoresca:
Jorge Hernández Mollar
sábado, 17 de diciembre de 2011, 09:39 h (CET)

La nueva legislatura se ha iniciado de la forma más pintoresca: sindicalistas, como Cayo Lara, que van al Congreso a celebrar el día de la Constitución para anunciar que no asistirán, diputados que van a la Zarzuela en bicicleta, otros que, como Bosch i Pascual, representante de ERC, le dicen al Rey que “quieren salir del reino” y los pro etarras de Amaiur, independentistas y algo más, que “exigen” grupo parlamentario en la sede de la soberanía nacional para disfrutar del sueldo y de los privilegios de los diputados “españoles”. Curiosamente ahora reclaman “democráticamente” la salida del reino, olvidándose que hasta ayer sus compañeros de viaje, nos dejaron el escalofriante legado de ochocientos españoles asesinados y miles de mutilados física y mentalmente que, según ellos, son parte obligada de su “proceso de paz…”

A este esperpéntico panorama se une la imparable escalada de asuntos judiciales en los que se ven envueltos políticos, jueces, banqueros, ministros, tonadilleras, empresarios y hasta duques y otras especies de la fauna llamada “clase pudiente”. Todos ellos envueltos en bufandas de millones de euros y dispuestos siempre a ir a los juzgados para negarlo todo, culpar de sus tropelías al vecino y sobretodo no devolver un solo euro de lo robado a los bolsillos de los españoles.

Personajes como Chaves, Pepiño, “el Bigotes”, Correa, Urdangarín, Garzón, Camps, la Pantoja etcétera, inundan páginas de periódicos, redes sociales, tertulias y televisiones, mostrando, no precisamente, lo más brillante y ejemplar de la sociedad española. Si a esto le añadimos la ola de secuestros de niños y jóvenes, los hachazos y apuñalamientos a mujeres por parte de sus maridos o compañeros, los millones de parados, los becarios explotados, los pensionistas angustiados y los funcionarios zarandeados, podemos llegar a la conclusión de que una grave enfermedad psiquiátrica está minando la salud de España a pasos agigantados.

España necesita someterse a una terapia de grupo. Primero tenemos que convencernos de que una buena parte de nuestra sociedad es absolutamente normal. Millones de españoles desean y les asiste el derecho de acudir a su trabajo diariamente para ganarse con honradez su sustento, contribuir a la riqueza nacional y percibir un salario digno. Millones de matrimonios, formalizados por la ley civil o religiosa entre hombres y mujeres y que conforman familias normales, desean educar a sus hijos escogiendo el modelo educación sin discriminación y con libertad. Millones de contribuyentes desean asimismo, que los servicios públicos funcionen con eficacia y que sus dineros se gestionen con transparencia y honestidad.

Millones de españoles exigen que nuestra justicia sea independiente, profesional y solucione los conflictos con rapidez y ecuanimidad y millones de españoles desean, también, no sentirse discriminados en su educación, salud, calidad de vida u oportunidades de trabajo por vivir en distintas ciudades, provincias o autonomías de España.

En segundo lugar y como parte de esa terapia, tenemos que conseguir que nuestros medios de comunicación y redes sociales nos ayuden a “normalizar” la vida española, transmitiendo los valores y virtudes del pueblo español. Nos corresponde a todos generar noticias positivas que a su vez sean “noticia”. Gobernar con altura de miras, sentido común y moderación es un primer paso para serenar la vida de los españoles y hacerla noticiable.

Cumplir con nuestras obligaciones ciudadanas, ser justos en la distribución de la riqueza, utilizar los fondos públicos para contribuir al bien común de la sociedad y ayudar a fortalecer el mundo financiero y empresarial para que renazcan millones de puestos de trabajo de calidad y bien retribuidos, es clave para que nuestra nación se encarrile sin sobresaltos por la ruta de la normalidad y prosperidad a la que tenemos derecho.

Perseguir al delincuente, aplicar justicia de forma rápida y eficaz y legislar con orden, racionalidad y respeto a los valores éticos o morales de la sociedad ayudaría a restablecer la confianza en el sistema y en las instituciones, hoy bastante deteriorada. En definitiva como dijo nuestro querido y casi olvidado ya Presidente Adolfo Suárez en aquella su famosa e histórica frase: “elevar a la categoría política de normal, lo que a nivel de calle es simplemente normal”.

Noticias relacionadas

Los 'nicas' somos especiales, en nada difícil quedamos atrás. Disponemos de uno de los himnos nacionales ser uno de los breves de los países en el mundo. Es todo un salmo litúrgico. Su letra es obra del insigne maestro leones Salomón Ibarra Mayorga. Su solemnidad, su brevedad y su concisión es toda una enseña de orgullo triunfal.

Las gentes de la posguerra, entre los que me encuentro, teníamos un pobre conocimiento del sentir andaluz. Vivíamos en medio de la exaltación de España especialmente como “una”. A lo largo de los años, este concepto ha ido cambiando progresivamente. Pronto empezamos a descubrir cómo otras regiones comenzaban a sacar la cabeza y a considerarse superiores a los demás. Una tendencia geográficamente dirigida de norte a sur. Los andaluces también teníamos derecho.

El pasado 28 de febrero de 2025, Día de Andalucía, a través de la pantalla de televisión, tuve dos sensaciones bien distintas. Por la mañana, en Canal Sur, vi la “Gala 28F” con la entrega de Medallas y nombramientos de Hijos Predilectos de Andalucía a los premiados de este año. Debo confesar que el acto resultó enormemente atractivo por su sencillez y emoción.

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© 2025 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© 2025 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto