-Recordando la “Sonatina” de Rubén Darío-
Nuestra España está triste … ¿qué tendrá en su cabeza? sus vergüenzas se esconden, bajo la sucia mesa, donde vende a la patria, un hombre sin honor. Está melancólica como el rostro de un moro, ya no tiene tronío, ha perdido el decoro, y despinta su enseña, por culpa de un traidor.
La Moncloa se alía con figuras banales, que empañan su destino con acciones teatrales, de gentes sin principios, como gusta al felón. España ya no sube, España va en pendiente; España ya se aleja de nuestro continente, sin orden ni concierto, negando ser nación.
¿Temerá que un bandido, con estudiada inquina, consiga transformarla en inmunda letrina trastocando la historia y arrancando la Cruz? ¿O en segar libertades, con leyes chocantes, con un solo motivo; ¡anular las de antes! para poner tinieblas donde siempre hubo luz?
¡Ay!, la sufrida España, hasta ayer flor y Diosa, que no quiere morirse, que quiere ser hermosa, que aspira a tener alas y con ellas volar; viajando contra el viento, tan veloz como el rayo, que cae profusamente en torno al mes de mayo sobre la tierra firme y también sobre el mar.
Se quedará sin oro y perderá la plata, porque las decisiones de ideología barata, las va tomando un torpe aprendiz de tahúr. Y lloran sin consuelo gentes del Sur y el Norte, desde las más sencillas, hasta las de buen porte, pues ven perdido el Norte y subyugado el Sur.
¡Desventurada España, la de los limpios cielos! ahora prisionera en manos de mochuelos, a punto de asestarle un azote mortal. A la que ha sido siempre soberana y gallarda, no le pega el futuro, que con estos le aguarda, desgajada con saña de su historia inmortal.
¡Qué bello sería encontrar, una senda válida! Para esta España triste, deslustrada y pálida, a mil leguas distante del brillo del marfil. Para llegar a tiempo de paliar la amargura, que le causaa diario, gente sin cultura con mucha caradura y pésimo perfil.
¡¡No sufras más España, que un viento se avecina, con ritmo acompasado como una limusina, que circula con calma y sin ningún temor!! ¡¡Y ya en los nuevos tiempos volverás a ser fuerte, tendrás nuevos afanes y días con mucha suerte, en los que todos juntos palpemos el amor!!
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