Carlitos
El que acreditaba existir antes de ser inventado da lástima y risa Empapela el bailarín seduce el gastronómico trasnocha el peluquero.
Súper ocho
Acciones simples: Robert Redford simula sostener una pared surcada por hormigas José Wilker simula entrar por la puerta de calle Toshiro Mifune simula saltar por una ventanaovalada Lautaro Murúa simula esconderse debajo de una alfombra raída Max Von Sydow simula probar los endebles sillones Arturo de Córdoba simula espiar a través de una Trabex Ugo Tognazzi simula silbar en la amplia cocina Enrique Serrano simula condimentar zapallitosrellenos con arroz Jean Paul Belmondo simula abrir cuidadosamente el botiquín Ubaldo Martínez simula secar los deslucidos azulejos
Laurence Olivier simula barrer el garaje José Sacristán simula rezar contrito en el jardín Klaus María Brandawer simula dormir en la azotea al concluir la larga morosa intrusiva última toma
de mi último moroso simulado más logrado film de paso reducido.
Sofía & Marcello
Marcello cabecea huevitos de codorniz Sofía contempla con una lágrima los zapatos vacíos y sortea sus besos presos cada fin de semana Marcello la confunde con la cruda Parca
Sofía se rapa musitando unos nombres Marcello putañero apostrofa en calabrés dentro del suntuoso vestidor del piso de Sofía
Viuda sofocada se carga Sofía a un carabinero
Hurta y come Marcello las asimétricas croquetas de las bandejas de un rey de mentirijillas e insemina para la eternidad en millones de copias
a la cuantiosa Sofía de una única noche apasionada.
Mi corazón a las estrellas
Cuando Pola Negri me abandona en 1928 cuando Ava Gardner me patea en 1937 cuando Tilda Thamar y Ana María Pierángeli después de jornadas tan intensas (y extensas) me desestiman en 1949 cuando Leslie Caron me aleja (según insiste, por mi bien) en 1960 cuando Romy Schneider me repudia en 1972 acusándome de competencia fortuita cuando Isabelle Huppert y Hanna Schygulla me descuidan en 1984 yo quedo resentido una y otra vez no aprendo nunca aprendo tanto o más vulnerable que en 1903 cuando lo de Sarah Bernhardt abierto mi corazón a las estrellas crudo exponente porteño asistiendo conturbado junto a Boris Karloff fuera de foco y en función fantasmal en el postrimero cinematógrafo de mi barrio
a la caída en la cascada de La novia de Frankenstein.
Procedimiento para mentar a cuatro rubias del cine
Inquietándose nos espiaban a su reverendísimo antojo las púberas Grace Kelly y Catherine Deneuve cambiándonos en el vestuario del glorioso Alumni en aquel primer lustro de trofeos y goleadas las chiquilinas de recalcitrante y precaria volubilidad a la hora señalada de los autógrafos y concluyentes mamás que también embargadísimas espiaban nuestra franqueza reafirmatoriamente hombruna y juguetona
Tiempos con Jane Mansfield allá en el Chantecler blonda juventud y aparatosa fugaces mordiditas en esos lóbulos del pasado escotes en los que Mamie van Doren se asilaba aromando su despiadada lejanía
para veneno de la muchachada.
Nacidas
Linda pero buena nacida para buena María Duval me quiere optimista y esforzado recto y esclarecido fiel, presentable, sincero y cariñoso generoso, piadoso y sentimental semental, prudente y oportuno
La mala de la película ha visto a la buena conmigo paseando por Gual e Itaquí y calumnia
Ha visto a la buena de la película congeniando conmigo y difama
La detractora mala de la película me ha oído susurrándole a la buena la idea fundamental de la filosofía de Descartes y detrae
Ha oído a la buena de la película bisbiseándome lo que a su entender entraña el concepto de coincidentia oppositorum y denigra
Visto y oído calumnia, difama, detrae, denigra e injuria
Nacida para mala en cambio, Golde Flami, linda sólo me quiere
para su exclusivo lucimiento.
Tan
Gloria Swanson siempre me llevó algunos años la volví loca con mi indiferencia después cedí: la tuve como amante
Tanta verborrea en una superstar del cine mudo (tantos galanes la besaron) tantos recuerdos
Hoy ella ya no vive y vamos como teniendo la misma edad
Me siento tan viejo que hasta la burla se quedó en los huesos porque me siento tan viejo.
Uno no queda
Uno no queda igual después de Lana Turner entre que te mira como te mira por primera vez y te descubre toma por asalto tu apartamento (nadie conoce tanto a Lana) y te toma a ti con un algo de incorruptible caníbal
de Hollywood.
Susannah York
Susannah York me recuerda mi deseo de haberla conocido
Susannah York recuerda mi deseo de haberla conocido
Descubrir mi recuerdo me descubre
Susannah York me desea recordándola.
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