Traducción del inglés al español por María Del Castillo Sucerquia
EL POETA
el poeta es un cuarto abandonado en una ciudad terrible vive con los muertos obsesionado con la memoria en lo alto una desnuda bombilla se balancea dentro de su cabeza merodean jaguares jaguares y chacales todo el día se le va llenando la cabeza como al fregadero atascado el grifo que gotea es un hombre con una misión es un hombre con un pequeño problema con el juego llena un boleto de la lotería con todos los números equivocados ¡qué risa! el poeta es un detective sin placa él está presente en la escena del crimen todos lo ignoran ¿a quién le importa de todos modos? cuando los policías se van se prueba toda la ropa del armario nada le queda bien se llena los bolsillos con caramelos duros y crema para la piel es un recogedor de trapos y todo lo anterior la historia humana está anudada en su puño como una soga es presa fácil para los amantes y mercaderes de sueños habla todos los idiomas todas las frases pronunciadas por las naciones perdidas están en juego en su cabeza su cerebro está en llamas su cerebro está manchado su cerebro está hecho de jeroglíficos vive en la tumba de los reyes olvidados su lengua es de pinturas rupestres su testamento fue escrito por un niño asustado y la ciudad lo aborrece no tiene dinero para gastar y nada que ofrecer excepto palabras sólo palabras cuando el casero llega a la puerta el poeta finge estar muerto
EL BESO
pudo ser cualquier cosa incluso, el alma de un pájaro imprevisible aterrizó en mis labios un milagro, supongo tan ingrávido tan familiar ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀un sostantivo femminile en suspensión (la rama de un niño en el bosque del norte) pudoroso como un pícolo un tanto rígido inerme ante el corolario las grandes distancias el progreso de un peregrino en tierras baldías (el ardiente calor de la selva la escritura alpina de campanillas azules y la nieve) el glissando del corazón más pequeño ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀sosteniendo lo insostenible
TENÍA QUE HACERSE
dudo sobre cabalgar en el corcel azul que aguarda en la puerta del corral por la caricia de la mano de un joven antes del amanecer, o sea, antes de que los camiones de dieciocho ruedas apaguen sus motores y se alisten para rodar como los interminables trenes de furgones retumbando al norte de Kansas todo ese polvo, el calor los tábanos que muerden y las llagas en la boca, los aguijones -el cuchillo del matadero- todo ese amor que un gobierno llama comercio y utilidad y ser práctico tenía que hacerse:
⠀⠀derribar al niño que aguarda ⠀⠀junto a la puerta colgante ⠀⠀a que venga su corcel azul
PARÍS, UN MORIBUNDO CISNE EN EL INFINITO ARCO DEL SOL
incluso en el regalo del ahora evoco tus primeros días sentada en la Plaza San Miguel a las ocho y media sola entre tantos en espera del último pretendiente
(había una geometría ingenua en tus modales como un péndulo las perlas colgaban de tu cuello) el camarero parloteaba a nuestro alrededor como un pajarito en busca ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀de una miga (en la mesa, un círculo de admiradores dentro del café, la canción de las flores de Delibes y un espacio en el pedal sostenía el bajo mientras las voces de dos sopranos coqueteaban por encima de él)
París eterna, joven, trágica París, un moribundo cisne en el infinito arco del sol agarrado al pecho y tú con esas muñecas perfectas un francés que desarmaba (¡cómo te justificaban los parisinos!) aún no estaba listo para dejar ir el amor
(yo era una figura menor en tu órbita que te conoció en Chicago siendo una colegiala, ¿y qué?) ¡los engañaste a todos! sí, tú y tu gracia natural bajo la luz artificial del Barrio Latino (pura algarabía y emboscada) demasiado humano demasiado perfecto para ser verdad (el arco musical que Pitágoras soñó en voz alta) tan pronto amanecía
BAJO UNA CUBIERTA DE HOJALATA EN LA LLUVIA TROPICAL
tomaron a tus hijos de los brazos de su madre y los envolvieron en las frías láminas de hormigón tomaron el pan de la boca de tus hijos y los arrojaron a los cuervos, rodeando el río Potomac se apropiaron del sudor en el cuello de tus hijos de la visión de los ojos de tus hijos les desvalijaron los músculos, la espina dorsal los pusieron a trabajar en sus respetables jardines jardines de cocaína, arroz, algodón, caña jardines para las manzanas en sus árboles para la ensalada en sus vajillas campos de lechuga, tomate, repollo, maíz amarillo bonitas rosas amarillas en los jardines de Texas cosecharon las lágrimas de tus hijos amarillas, como todas las lágrimas de los pobres que yacen en todos los pisos del mundo al margen del sol, cautivos en cada prisión y barrio de la historia colonial sustituyeron el sexo de tus hijos con sucias mentiras y las semillas del espinazo de tus hijos usurparon también, las esparcieron de un tirón como fertilizante sobre sus campos tomaron los dedos de las manos de tus hijos y los envolvieron con plástico transparente bien apretados para el mercado robaron el aliento a los pulmones de tus hijos la inocencia de sus sueños luego, subastaron las sobras de tus hijos
cuerpos bajo una cubierta de hojalata en la lluvia tropical
OJALÁ PUDIERAS SOSTENER LA MIRADA DE TUS HIJOS
ojalá pudieras sostener la mirada de tus hijos por siempre viajero de la tierra, mientras caminas hacia la muerte tú, en la bata de cenizas tú, como los aburridos ministros del próximo mundo ya te empujan a través de su puerta más fuerte de lo que nunca fuiste más fuerte incluso que tus hijos quienes te han enriquecido quienes, ahora, son los adultos en la habitación, y tú el pequeño -la vida es un hilo débil atravesando una bobina-
con la piel del color del suelo, la rodilla cojeando la respiración como un fuego de antaño ¡agarra con firmeza esta mano, hijo de las estrellas!
¡agárrate fuerte niño del más allá! ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀balacéate fuera del tiempo
en confianza y en verdad, esta es la mano que nunca antes comprendiste ahora, aférrate al amor.
En el siguiente enlace el escritor, poeta y columnista internacional nicaragüense Carlos Javier Jarquín, recita el poema titulado EL POETA de la autoría del poeta George Wallace:
Sobre el autor:
George Wallace (22 de marzo de 1949, Hempstead, Nueva York, Estados Unidos) es un poeta y promotor de poesía. Obtuvo residencia en Walt Whitman Birthplace y fue el primer poeta laureado del condado de Suffolk. Es autor de 36 libros de narrativa y poesía, publicados en Estados Unidos, Reino Unido, Italia, Macedonia e India. Es una figura prominente en la escena de la actuación de poesía de Nueva York. Durante mucho tiempo viajó internacionalmente para actuar, dirigir talleres de escritura y dar conferencias sobre temas literarios. Enseña escritura en Pace University (NYC) y en Westchester Community College. Ha realizado residencias de investigación en el Centro de Estudios Helénicos de Harvard en Washington DC. Su trabajo se recopila en la Colección de Secciones Especiales, Instituto de Estudios LI de la Universidad de Hofstra. George es editor de Poetrybay.com, coeditor de Great Weather for Media y editor de Long Island Quarterly y Walt's Corner, una columna de poesía semanal en The Long Islander, un periódico comunitario fundado por Walt Whitman en 1838.
María Del Castillo Sucerquia (Barranquilla, 1997), es una poeta bilingüe, escritora, agente literaria, tutora, médica oriental (Neijing, España) y traductora (francés, inglés, italiano, portugués, ruso, griego, español y alemán). Traductora de muchos escritores alrededor del mundo y conocida por ser un gran puente entre ellos autores de lengua extrajera y el mundo del habla hispana. Con experiencia en radio y actuación (teatro y cine). Ha participado en numerosos festivales de poesía, recitales, foros, conferencias y encuentros culturales. Sus poemas han sido traducidos en diversas antologías, revistas, periódicos y sitios web nacionales e internacionales.
Ante el culto léxico utilizado en la creación de sus poemas y los escritos en prosa, la comprensión y entendimiento a Rubén Darío, no es nada fácil, lo que en alguna manera ha provocado que la juventud no lo lea y no lo estudie muy a pesar de su grandeza como poeta genial, que contribuyo arraigar nuestra identidad nica e hispana.
Miel azul… vaya utopía… la mía. Miel color cielo y cielo deseado, amado, valorado. Miel azul, azul miel. Tú y yo hasta el más azul de los azules, oyendo a Sabina cantar, recitando poesías y queriendo creer, viendo, como otros se afanan en no hacerlo.