La publicación de lecciones de Xavier Zubiri que permanecían inéditas es una magnífica iniciativa que pone en manos de los lectores 1.236 páginas de contenidos esenciales para comprender mejor la evolución de la filosofía zubiriana y de su génesis a través de los años. Su curso Filosofía primera fue impartido entre los años 1952 y 1953.
El primer volumen desarrolla los primeros análisis sistemáticos de la inteligencia sentiente y es anterior a Sobre la esencia, uno de los libros capitales de Zubiri. De todas formas, es evidente que las ideas iniciales sobre inteligencia y realidad ya están presentes en estas lecciones que publica Alianza Editorial.
A lo largo de los dos libros se establece un diálogo sin límites previos, con la tradición filosófica clásica representada por filósofos de la talla de Aristóteles, Descartes, Kant, Hegel, Husserl y Heidegger, algo que Zubiri también realiza en otras obras como, por ejemplo, Los problemas fundamentales de la metafísica occidental. Comenta y elabora nuevos enfoques filosóficos y también, al mismo tiempo, con un talento admirable construye su propia filosofía, con una precisión y rigor extraordinarios.
Para Zubiri está claro que la tarea de la filosofía es primordial ya que es el análisis de las relaciones entre la inteligencia y la realidad. Y esto engloba a toda la metafísica, con su teoría del ser y también a la subjetividad y el pensamiento, en todas sus formas. Además, también se interesa por las diversas ciencias y por el arte y las ciencias sociales y humanas. Su capacidad analítica se aplica también a la religión y la teología. En estas dos obras se observa la elaboración de originales desarrollos conceptuales de diversos conceptos metafísicos como son: tipos de realidad, esencia, sustancia, existencia, causalidad, espacio y tiempo, dar de sí, etc.
Es como si estuviéramos en el taller o en el gabinete de este gran filósofo español, asistiendo a sus variaciones sobre significaciones e interpretaciones muy precisas y coherentes,que fueron conformando su realismo radical a lo largo de su trayectoria filosófica. Y esto, en sí mismo, ya tiene un valor incalculable, no solo para los filósofos, porque es una filosofía que está abierta a todos los lectores que se quieran introducir de lleno,en un sistema filosófico muy agudo y a la vez hermoso por su finura, amplitud, grandeza y con numerosos matices conceptuales poderosos. En estos dos tratados aparecen reflexiones sobre multitud de cuestiones que ocupaban la mente de Zubiri.
Este filósofo vasco y español indica claramente que la vida se tiene que realizar de un modo inexorable se quiera o no. Escribe Zubiri: “En cambio, no le es accidental en manera alguna “tener que tener” una vida”. Ya que es algo forzoso e inevitable, porque la capacidad de elegir que es la expresión en la realidad de la libertad es lo propio de la forma de ser humana.
Además, como se puede suponer la conexión de las cosas de la realidad es algo que expresa la interdependencia de todo lo que existe de modo real, en todos los aspectos pensables. Por eso escribe Zubiri que no hay ninguna realidad que sea independiente de las demás.
En este curso o en estas lecciones se pone el énfasis también en la integración o en la relación directa entre esencia y realidad que aparecerá más desarrollada en su libro Sobre la esencia y que ya está presente pero con otra terminología y consecuencias en la metafísica aristotélica.
Respecto a la cuestión del movimiento y del reposo desde los análisis de Zubiri el entender no es movimiento ni reposo como estado sostenible de la actividad de la inteligencia. Los modos de la realidad objetual también son analizados y descritos con orIginales elaboraciones, que son un punto de partida para posteriores desarrollos en tratados posteriores de Xavier Zubiri. Otros pensadores como, por ejemplo, Millán-Puelles en su libro Teoría del Objeto Puro consideraron estos planteamientos, para partir de ellos en su filosofía.
Las reflexiones sobre el tiempo y el espacio también están presentes en estas lecciones. Escribe Zubiri que “Por ser corpóreo, el hombre está ciertamente en el tiempo de la sucesión”. E insiste en la significación del tiempo de cada uno en sus proyectos de vida. El tiempo se entiende también como un recurso imprescindible para la acción y también como la real posibilidad para poder existir de la manera que se desea.
Como él mismo dice “Las acciones que se ejecutan son modos de duración, no otra cosa”. En esta reseña o artículo he expuesto algunos aspectos de la filosofía de Zubiri. Es una invitación a la lectura de sus tratados. En mi tesis doctoral titulada Esencia y transcendentalidad en el realismo de Zubiri trato de numerosas cuestiones de su filosofía, que también están en relación directa con la tradición filosófica y con el presente y el futuro de la misma. La filosofía está viva e incardinada en el presente.
Con motivo de la catástrofe de la pasada semana, algunos “voceros” (no les puedo llamar informadores) más o menos documentados y bastante tendenciosos, no se han privado de realizar valoraciones y comentarios de todo tipo arrogándose unos conocimientos de los que carecen.
La DANA que afectó recientemente a varias zonas de España, dejó huella en el paisaje y más allá de la devastación, reveló la verdadera esencia de la solidaridad humana. Valencia, una de las áreas más gravemente afectadas, vivió de primera mano la respuesta de miles de personas que, ante la emergencia, dejaron de lado sus propios problemas para ayudar a todos y colaborar en los trabajos de rescate y limpieza.
La industria alimentaria de origen animal es la principal causa de la crisis ecológica y climática, al destruir los océanos y bosques que regulan el clima terrestre y emitir más GEI que el transporte mundial, y el urbanismo descontrolado aumenta los efectos de las inundaciones: transición a dietas vegetales y decrecimiento profundo como medidas urgentes y silenciadas ante el previsto aumento exponencial de catástrofes climáticas.