Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Opinión
Etiquetas | Canarias | Ley | perros | Gatos | Animalismo | Cazadores

Canarias: islas desafortunadas para perros y gatos

"Tenéis un mes y pico para matarlos"
Julio Ortega Fraile
miércoles, 5 de julio de 2023, 09:03 h (CET)

Canarias autoriza el asesinato de perros, gatos y hurones sin dueño o libres (el tecnicismo que utilizan para condenarlos a muerte es "asilvestrados") hasta que en septiembre se implante la Ley que ya no permitirá asesinarlos. El valor de una misma vida y la categoría de que sea crimen o no arrebatarla depende de la disposición final de un Real Decreto en forma de plazo. Y de la suerte o desdicha de la víctima de ser localizada por los escopeteros antes o después de su entrada en vigor.


Claro, que desde el gobierno canario esto lo califican de otra manera y que así no desentone con la nomenclatura para matanzas ya normalizadas, de tal modo que lo llaman "caza menor".


¿Se imaginan que cuando en 2007 se aprobó en España la Ley que prohibía pegar a los hijos, entre que salía y no salía publicada en el BOE, en alguna Comunidad se autorizase expresamente a partirles la cara de un buen bofetón? Ya, ahora aparecerán los que siempre se escandalizan con estos paralelismos afirmando que en ese caso se trata de niños. Sí, efectivamente, pero en todos ellos hablamos de violencia, y además en la piel de estos perros, gatos o hurones con resultado de muerte.


Los cazadores, como no podía ser de otro modo y les dicta su acostumbrada agresividad y bajeza, felices de poder asesinarlos legalmente. De forma ilícita ya lo venían haciendo en no pocas ocasiones y esta es una reivindicación permanente desde ese mundillo de plomo, cuchillos, sogas, cebos envenenados y jueces levantando cuerpos de humanos. Conviene recordar también que buena parte de esos perros y casi todos los hurones que van a reventar a tiros por no ir acompañados de un humano son “excedentes” de la caza. Cuando ya les resultan inservibles para su cruento pasatiempo los sueltan en el mejor de los casos. Otras veces se los llevan por delante.


Los cazadores aprietan el gatillo y hunden el acero. Ellos disfrutan haciéndolo. Eso les convierte en gentuza muy peligrosa. Ciertos políticos alientan y blanquean esas masacres, lo que además de peligrosos les lleva a ser inductores y cómplices.

Noticias relacionadas

A lo largo de la vida podemos comprobar cómo la madre es el “punto de encuentro” capaz de reunir a todos los miembros de una familia por muy desperdigados que estos se encuentren. No voy a descubrir ahora el valor de la madre como persona, como conciliadora y como sumo matriarca. Pero, una vez más, me vuelvo a sorprender por su capacidad de comprensión, de su forma de tratar a cada uno de los hijos, nietos y demás familiares como si fueran los únicos seres del mundo.

La hipocresía, entendida como el acto de fingir virtudes, sentimientos o intenciones que no se tienen, se ha convertido en una herramienta cotidiana. Personas que critican en voz alta lo que en privado practican, quienes predican valores que no aplican o aparentan estar por encima de los demás.

La vida hecha juego. Otra vez. Como si el tiempo no hubiera pasado, pero con nuevos retos, reglas y trampas. Hace tres años reflexioné sobre el paralelismo entre El Juego del Calamar y la situación político-social en España. Ahora, con el estreno de la segunda temporada de esta distopía televisiva, toca revisar si algo ha cambiado. Spoiler: todo sigue igual. La serie, al igual que nuestra realidad, parece condenada a repetirse.

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© 2024 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© 2024 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto