Andares en el espacio-tiempo/ lentos andares con prisas/ andares a mandíbula latente/ andares cabeza abajo/ maseteros andarines/ a dentelladas andando.
Si uno/ olvida que es un aprendiz/ uno deja de ser maestro.
Los recuerdos no tienen paredes/ las miradas no tienen planos/ las entrañas no tienen tiempos/ los deseos no tienen límites.
Si uno/ no se encariña de su vida/ se encariña de su muerte.
Desnudarte, despoblarte y a la vez poblarte
Según me he ido desnudando/ a lo largo de mi vida/ he ido viendo cómo/ se les iba cayendo el ropaje/ a todos los demás.
Desnudarte es despoblarte/ desnudarte es despoblarte/ y a la vez volver a poblarte/ Desnudarte es despoblarte/ de lo que todavía te ata.
Desnudarte es poblarte/de nuevos deseos/ o de los deseos de siempre/ abriéndose paso/ por los caminos del ahora/ con ilusiones presentes/ con pasiones profundas.
La vida son pasiones/ o son ataduras/ disfrazadas de razones/ asesinas de ternuras.
Desnudarte es arrancarte/ con dolor las ataduras/ despoblarte de servidumbres.
Desnudarte es poblarte/ con pasión, de placeres/ desnudarte es apostar/ con valor, por deseos/ conscientes y tiernos/ que rompen cadenas/ en apariencia racionales.
¡Ay, ay, ay, somos querencias!
El cerebro no duele, la conciencia sí
En la pequeñez/ de la conciencia humana/ reside la grandeza/ del resto de la materia.
El cerebro no tiene receptores del dolor, no duele. La conciencia duele. Pero duele porque es esquizofrénica. La conciencia liberadora duele mucho. La conciencia lúcida duele bastante. La conciencia amordazada duele poco. La conciencia abotargada casi no duele. Y la conciencia amortajada no duele nada.
La conciencia es menos de un 1% de la psique humana, lo demás es inconsciente. Su escisión nos recorre por el Ello, el Yo y el Superyó. Esa es la fuente de todas nuestras esquizofrenias.
Somos quienes nos pueblan, desde que nacemos hasta que morimos. Somos esquizofrenias que nos pueblan, desde que nacemos hasta que morimos. Quienes nos pueblan esquizofrénicamente nos insertan lo que les puebla.
Nos pueblan trabajo y explotación, liberación y opresión, placer y represión; nos pueblan palabras vacías y agudas, miradas duras y tiernas, sonrisas falsas y sinceras; nos pueblan abrazos dominantes y solidarios, caricias posesivas y cariñosas, besos poseedores y placenteros; porque nos pueblan momentos bondadosos y tiempos perversos, experiencias que nos hunden y que nos elevan, sabiduría entregada y conquistada; nos pueblan mentiras y verdades, inocencia y malicia, gozo y dolor.
Nos pueblan conciencias oprimidas y liberadoras, conciencias subordinadas e independientes, conciencias reaccionarias y revolucionarias. Y uno se pasa la vida apostando entre las esquizofrenias, ay, que nos pueblan. Por eso la conciencia duele.
Cantemos a nuestra vida, porque resuenan muchas vidas y, cuando nos pueblan, emanan todas esas vidas; porque pululan muchas risas y, cuando nos pueblan, retumban todas esas risas; porque en nuestra sangre habitan muchas sangres y, cuando nos pueblan, fluyen todas esas sangres.
Individuos sociales con conciencia emocional
Porque la ley universal de la contradicción es inexorable/ y las contradicciones particulares imposibles de ignorar/ porque lo universal reside en lo particular/ se recomienda ser consciente de las propias contradicciones.
Siendo conscientes, y respetuosos, no sólo de las leyes de la física y sus derivados químicos y biológicos, sino también de las leyes del materialismo histórico, ¿podemos ignorar ciegamente, como individuos esencialmente sociales, las leyes de la psique humana, que íntimamente pueblan nuestro cerebro?
Somos individuos sociales y conciencia emocional. Tenemos una contradicción básica en nuestra realidad y en nuestra conciencia, como individuo social determinado socialmente y como individuo social determinado individualmente. La base material es que somos un individuo, pero un individuo social con una muerte individual socialmente determinada.
No es fácil andar desnudo por la vida.
Posdata. Mi humilde obsequio para los que tienen a bien publicarlo, para los que tengan a bien leerlo, para los que tiernamente me pueblan y para mi Mar y sus mares, para poblar otoñales.
Se ganan afectos/ muy diversos/ que sean muchos/ se cumplen afectos/ muy intensos/ que duren mucho.
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