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​Los pecados capitales

Antonio Carrasco Santana, Valladolid
Lectores
sábado, 25 de enero de 2025, 10:53 h (CET)

La palabra “capital”, como otras muchas, puede ser sustantivo o adjetivo. Emparentada etimológicamente con cabeza, como sustantivo, puede designar el lugar donde reside una población que destaca sobre otros por causas diversas, como su representatividad; por ejemplo, Washington es la capital de Estados Unidos. Como adjetivo, suele emplearse para señalar la relevancia del sustantivo al que acompaña, como sucede con los pecados capitales, así adjetivados por su importancia, que estriba en que son los que tienen la capacidad de engendrar, de originar otros.


Los pecados capitales, herederos de una tradición que se remonta al siglo III d.C., y recogidos en el Catecismo de la Iglesia católica, como es sabido, son siete: soberbia, avaricia, envidia, ira, lujuria, gula y pereza. Lo cierto es que, independientemente de si se es creyente o no, o, de serlo, de si uno pertenece a tal confesión, se han tenido y se tienen, a menudo, como un referente ético en Occidente, del que derivan principios morales de comportamiento en multitud de actitudes individuales y sociales. No obstante, no siempre son bien interpretados, fundamentalmente porque, con frecuencia, se hace de forma restrictiva, particularmente en el caso de los dos últimos. En este sentido, conviene precisar que la gula no solo se refiere al exceso en el comer y en el beber, sino a cualquier desorden por lo que a los deseos en general se refiere, que se revela en una manifestación excesiva y descontrolada de estos en todo ámbito. En cuanto, a la pereza, no solo incluye la desidia, la desgana o la vagancia; es decir, no ha de entenderse exclusivamente, según la tradición, como una falta de diligencia, sino, también, como la ausencia de proactividad en la caridad, en la solidaridad, en el bien común, en el amor por el prójimo.


No es una novedad que el pasado lunes, 20 de enero, en Washington, capital de los Estados Unidos de América, Donald Trump tomó posesión como cuadragésimo séptimo presidente de dicha república. Que el personaje concita todo tipo de simpatías y odios (irracionales las unas y los otros la mayor parte de las veces, en consonancia con sus comportamientos intencionadamente provocativos y extravagantes) es una evidencia, del mismo modo que lo es que sus declaraciones, intenciones y decisiones resultan de capital importancia para el mundo entero.


No está en mi ánimo juzgarlo, ni siquiera por sus políticas; aún menos, teniendo en cuenta que yo no puedo decidir votarlo o no. Lo que sí puedo y debo hacer (creo) como ciudadano español y, en consecuencia, europeo —por tanto, expoliador, según Trump, y expoliado, según yo lo veo—, es reflexionar sobre sus palabras en los discursos y declaraciones que ha realizado estos últimos días y brindarles a ustedes la posibilidad de hacerlo también a la luz (o a la oscuridad, según se mire) de los siete vicios reseñados más arriba. Para ello, a continuación, incluiré algunos fragmentos textuales, la mayor parte de palabras pronunciadas por él el día 20, que, estoy convencido, de que ustedes sabrán valorar adecuadamente.


“Dios me salvó para hacer a Estados Unidos grande de nuevo”. (Discurso de toma de posesión)

“[…] la edad de oro de Estados Unidos comienza ahora mismo. A partir de hoy, nuestro país florecerá y volverá a ser respetado en todo el mundo. Seremos la envidia de todas las naciones, y no permitiremos que se sigan aprovechando de nosotros durante todos, y cada uno de los días de la Administración Trump, sencillamente pondré a Estados Unidos primero”. (Discurso de toma de posesión)


“Seremos una nación como ninguna otra, llena de compasión, coraje y excepcionalismo. Nuestro poder detendrá todas las guerras y traerá un nuevo espíritu de unidad a un mundo enfadado, violento y totalmente impredecible. América volverá a ser respetada y admirada, incluso por las personas de religión, fe y buena voluntad. Seremos prósperos. Estaremos orgullosos. Seremos fuertes y ganaremos como nunca antes. No nos conquistarán. No nos intimidarán. No nos doblegarán y no fracasaremos. A partir de hoy, los Estados Unidos de América serán una nación libre, soberana e independiente. Nos levantaremos con valentía. Viviremos con orgullo. Soñaremos con audacia y nada se interpondrá en nuestro camino porque somos estadounidenses. El futuro es nuestro y nuestra edad de oro acaba de empezar”. (Discurso de toma de posesión)


“Estados Unidos volverá a ser una nación manufacturera, y tenemos algo que ninguna otra nación manufacturera tendrá jamás: la mayor cantidad de petróleo y gas de cualquier país de la Tierra, y vamos a utilizarlo. Bajaremos los precios, volveremos a llenar nuestras reservas estratégicas hasta arriba y exportaremos energía estadounidense a todo el mundo. Volveremos a ser una nación rica, y es ese oro líquido bajo nuestros pies el que ayudará a conseguirlo”. (Discurso de toma de posesión)


“Comenzaré inmediatamente la revisión de nuestro sistema comercial para proteger a los trabajadores y las familias estadounidenses. En lugar de gravar a nuestros ciudadanos para enriquecer a otros países, pondremos aranceles y gravaremos a los países extranjeros para enriquecer a nuestros ciudadanos. Para ello, vamos a crear un servicio de ingresos externos que recaudará todos los aranceles, derechos e ingresos. Será cantidades masivas de dinero que vierten en nuestro tesoro procedentes de los extranjeros sociales. El sueño americano pronto estará de vuelta y próspero como nunca antes”. (Discurso de toma de posesión)


“América reclamará su legítimo lugar como la nación más grande, más poderosa y más respetada de la Tierra, inspirando el asombro y la admiración del mundo entero. Dentro de poco, cambiaremos el nombre del golfo de México por el de ‘golfo de América’, y devolveremos el nombre de un gran presidente, William McKinley, al Monte McKinley, adonde debe estar y adonde pertenece”. (Discurso de toma de posesión)


“El Presidente McKinley hizo a nuestro país muy rico a través de los aranceles y a través del talento. Era un hombre de negocios y le dio a Teddy Roosevelt el dinero para muchas de las grandes cosas que hizo, incluyendo el canal de Panamá, que ha sido tontamente dado al país de Panamá después de que Estados Unidos... Estados Unidos, quiero decir, piensen que en esto gastaron más dinero que nunca antes en un proyecto y perdieron 38.000 vidas en la construcción del Canal de Panamá. Se nos ha tratado muy mal con este tonto regalo que nunca debió hacerse, y se ha roto la promesa que Panamá nos hizo. El propósito de nuestro trato y el espíritu de nuestro tratado han sido totalmente violados. A los barcos estadounidenses se les está cobrando gravemente de más y no se les está tratando justamente de ningún modo, forma o manera, y eso incluye a la Marina de Estados Unidos. Y sobre todo, China está operando el Canal de Panamá. Y nosotros no se lo dimos a China. Se lo dimos a Panamá y vamos a recuperarlo”. (Discurso de toma de posesión)


“El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, recibió este viernes [10 de enero] la sentencia por el caso de falsificación de registros comerciales para silenciar una relación con la exactriz de cine para adultos Stormy Daniels previa a las elecciones de 2016”. (Noticia publicada por BBC News Mundo de 10 de enero de 2025)


“Juntos no nos amilanaremos. Acabaremos con la epidemia de enfermedades crónicas y mantendremos a nuestros hijos seguros, sanos y libres de enfermedades. Estados Unidos volverá a considerarse una nación en crecimiento, que aumenta su riqueza, expande su territorio, construye sus ciudades, eleva sus expectativas y lleva su bandera a nuevos y hermosos

horizontes, y perseguiremos nuestro destino manifiesto hacia las estrellas, viendo a los astronautas estadounidenses plantar las barras y estrellas en el planeta Marte”. (Discurso de toma de posesión)


“PERIODISTA: ¿Qué podemos esperar de los países de la OTAN que menos gastan como España, Francia por debajo del 5%?


TRUMP: España está muy baja. ¿Y sin embargo son una nación BRICS?


PERIODISTA: ¿Cómo?


TRUMP: Son una nación BRICS en España, ya sabes lo que es una nación BRICS, lo descubrirás. Y si los países BRICS quieren hacer eso, está bien, pero vamos a imponer al menos un arancel del 100 % a los negocios que hagan con Estados Unidos.


Sabes qué son los BRICS, ¿verdad? Ustedes lo saben. Sabes lo que estoy diciendo, ¿verdad? Sabes lo que estoy diciendo. Entonces ni siquiera es una amenaza. De hecho, desde que hice esa declaración, Biden dijo, bueno, nos tienen al borde del abismo. Dije, no, los tenemos sobre un barril. Y no hay manera de que puedan hacer eso.


PERIODISTA: ¿Se trata de una orden ejecutiva aplicable a España?


TRUMP: Como nación BRICS, sí. Tendrán un arancel del 100 % si siquiera piensan en hacer lo que pensaban”. (Traducción de un fragmento de la rueda de prensa informal en el despacho oval el día 20 de enero de 2025 durante la firma de órdenes ejecutivas. Pregunta David Alandete, corresponsal del periódico español ABC)


“Hoy, firmaré una serie de órdenes ejecutivas históricas. Con estas acciones, comenzaremos la completa restauración de América y la revolución del sentido común. Así que es absolutamente de sentido común, en primer lugar, declarar una emergencia nacional en nuestra frontera sur. Se detendrá inmediatamente toda entrada ilegal, y comenzaremos el proceso de devolver a millones y millones de extranjeros criminales a los lugares de donde vinieron. Restableceremos mi política de ‘quédate en México’”. (Discurso de toma de posesión)


Permítanme una sugerencia: si tienen fe, rueguen insistentemente por Trump; si no, recen implorando fe.

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