Señores, yo no seré la niña sándwich, la segunda en la vida de Xoán, la que perderá importancia por una tercera que llegará con el tiempo. No seré la niña sándwich porque nunca me has querido en realidad, porque eres un faldero, solamente ahora me buscas porque la primera mujer te falla y tu relación acabaría en fracaso tarde o temprano.
Revisa en otras avenidas que yo no seré la segunda. Quiero que ocupe el puesto otra, juro no ponerme celosa cuando me toque verlo. Sí, cuando tengas hijos de ella y la vida vuelva a tener sentido para ti… Volverías a olvidarte de mí y después ya no habrá nada, pues los años van en contra. Tampoco seré la tercera ni tú querrás que lo sea. Estaré ya muy vieja y seca y sin nada que ofrecer. No seré la niña sándwich porque no deseo llorar cuando te vea regresar al pasado a cada instante, cuando llames por teléfono a tu ex mujer o pasees con tus dos hijos, en fin.
Prefiero ser una solterona solitaria antes que estar con un ser tan comprometido, que lo mismo que dejó a la primera, dejará a la segunda, y así… hasta que se canse… y me dejará, porque yo no sabré vivir en una situación así y la vida sería insoportable para él.
Dicen que a la tercera va la vencida, pues búscate una buena pieza. Encuentra una mujer que te ame, y déjame sola. Quiero vivir y reír, fiesta y buenas amistades que llenen mis días. No será lo nuestro una realidad más.
Y si sigues insistiendo, que Dios te lo cobre. Que si no me comprendes, no mereces vivir.
|