Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Opinión
Etiquetas | Recuerdos | Memoria | Tiempo | Reflexiones

Hay ciertas fechas

Fiarnos de nuestra limitada capacidad de recordar es un error
Gabriel Lanswok
miércoles, 7 de septiembre de 2022, 09:19 h (CET)

Hay ciertas fechas y festividades en las cuales se percibe que algo ha cambiado, un pequeño momento en el que existe lo viejo y lo nuevo; en donde el pasado y el futuro se observan de frente; un instante en el que se dejan ciertas cosas, ciertos recuerdos atrás. Al detenernos a pensar en el mistérico resplandor del tiempo, es fácil suponer que en realidad las cosas no son así. 


Las fechas que se mostraban especiales bajo el marco transitorio pierden todo límite de cambio, los nuevos momentos no se ven limitados al inicio del nuevo año como símbolo de un ciclo que se va en una sola renovación; más bien, el tiempo es en su esencia un acto que se renueva formando un presente simbólico y constante, cada día, cada segundo que nace se encuentra en sí mismo purificado… El nacimiento de su naturaleza se observa en la memoria, por ello es que un cristiano es eterno en tanto que vive en la memoria de su Dios… 


Sin embargo, más allá de la reflexión temporal del tiempo, su inexistencia es aterradora a la vez que nos brinda la libertad de iniciar de nuevo en cualquier momento; aunque biológicamente podemos observar el paso del tiempo, su existencia psicológica es absurda, cada recuerdo de cada error cometido es solo un espectro que la imaginación a tinturado, una imagen sesgada de aquello que existió y fue real. 


Es por todo esto por lo que fiarnos de nuestra limitada capacidad de recordar es un error; es por todo esto que esperar un día especial para escoger otro camino y cambiar es un error aún mayor. El sueño de la muerte puede hipnotizarnos en cualquier momento, razón suficiente para retomar lo que en su momento consideramos imposible, aquel hermoso sueño al que llamamos vida.

Noticias relacionadas

Corría el mes de abril de 1994 cuando un grupo de malagueños celebramos la Semana Santa en el lejano cantón Valais de Suiza. Por aquellos tiempos dedicaba buena parte de mi tiempo a transmitir, en la medida de mis posibilidades, el Evangelio. Estaba totalmente involucrado en las tareas de evangelización del Cursillo de Cristiandad. Una tarea gestionada por seglares.

Al referirnos a las expresiones del habla cotidiana, las quejas son las principales protagonistas. Independientemente de cómo se exprese cada cual, somos muy perspicaces en la crítica dirigida a los demás y poco propensos al examen del escaparate propio. Sin embargo, no es tan sencillo pronunciarse al respecto, debido a las imprecisiones propias, las tretas ajenas y los muchos factores implicados.

Los que desde muy pronto y ya sin interrupción hemos tenido un contacto frecuente con los libros sentimos cierta incomodidad al oír consejos y expresiones como “leer es bueno”, “un libro es un amigo” o “lee lo que quieras, pero lee”. Es como si alguien dijera: “¡viva la comida!, da igual qué comas, lo importante es que comas”, o “beber es vivir, sea lo que sea que bebas, bebe”.

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© 2025 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© 2025 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto