Presumen los izquierdistas de que su moral es intachable y superior a la de los demás. Aparte de que los españoles tenemos el dicho de “dime de qué presumes y te diré de qué careces”, eso es indemostrable. De pequeño, me enseñaron que nunca debería de mentir, porque la mentira es intrínsecamente perversa. Además los españoles tenemos varios dichos sobre la inefectividad de la mentira como: “antes se coge a un mentiroso que a un cojo”, o la mentira tiene las patas muy cortas”. En cambio Göebels, nazi y uno de los responsables del Holocausto, acuñó una frase para blanquear la mentira, “una mentira repetida mil veces se convierte en una verdad”. Por desgracia esta Izquierda de hoy, y de siempre, hace suya dicha frase, aunque tengo la duda de si la ha tomado del mencionado nazi, o este la copio de la izquierda. Siendo el Comunismo antes que el nazismo, posiblemente sea así. En la nueva etapa, tras la Transición, el primero en mentir, que yo recuerde, fue Felipe González quien esgrimió la mentira por bandera con sus “CIEN AÑOS DE HONRADEZ” (¿los socialistas honrados?¡Amos anda!) La Historia nos ha dado cumplidas muestras para conocer la honradez, probidad y bien hacer de esta formación política desde 1931 en adelante. Durante la Segunda República, las fuerzas radicales, entre las que se incluían los socialistas, optaron por métodos contrarios a la democracia, igual que ahora mismo está ocurriendo. “La cabra siempre tira el monte”. Oír a Largo Caballero, aún hoy en sus escritos, pone los cabellos de punta y da pavor. Llegó a decir que si las derechas ganaban las elecciones irían a la guerra civil, como realmente ocurrió. Fue un alzamiento militar propiciado y auspiciado por las izquierdas que habían hundido a España en un estado de inseguridad imposible de soportar, con crímenes, asesinatos y desmanes por doquier. La mentira hoy ha echado raíces en el Gobierno. Pedro Sánchez es el paradigma de la mentira. Quien miente, además de engañar, no es horado. Es así que Pedro Sánchez miente luego… Este Pedro Sánchez que nos gobierna, no ha dejado de mentir y desdecirse desde que ha llegado al poder, su honradez resplandece por su ausencia. La Izquierda no puede, ni tiene motivos para sentirse superior a nadir porque su moral es desconocida. Son hechos incontrovertibles patentizados por las actuaciones de sus integrantes. Se podrían llenar páginas y páginas exponiendo las mentiras, engaños, y trapacerías de este Pedro Sánchez y de sus conmilitones de todos los tiempos, pero ¿para qué cansar a los lectores cuando son tan patentes y están a tan a la vista?
|