Bolero mechado
A ver qué hacés con tanto sol, mostrame que no solamente una vez amé en la vida ¡Con lo que me gustaría estar en tus planes! precisarme en diría la más precisa de las acepciones
Vos me definís (guión) definirías si te pienso fallezco si te siento si te cité será que clamo que viniste ya que es así quedate para siempre ganas de decirte que tengo que te quiero ganas libres la gana
Yo te bendigo atentamente ven digo a mí. * Rubia en movimiento Aparece y desaparece rubia de verdad te encuentra en su libreta y llama por teléfono cuando ya la olvidaste
viene y no viene es detenida, pero se va se deja retener huyendo equidistante y cariñosa
te exige que la quieras mientras la querés te hace dudar que es lo que precisa creer que advierte para disparar para arrancarse de vos insostenible tibia disgustada. *
Festejo
¡Y yo que te festejaba!
Colgaste de tu cuello la patita sangrante de mi conejo favorito ¡y yo que te festejaba!
Divinizaste mis quejidos pero qué te costaba interceptar la rabia y la risa. * En verso
Espantado por tu limpio nombre salí a relucir veteado y calvo cosa que me reconozcas autonomía de espanto
Yo te sublimo a medianoche entre gritos desgarradores y paradas de carro
En verso impreco consubstanciado te reclamo caten catadura y carisma estofa del armisticio viva. *
Tropezón
No me engañés con vos con tu no soy cierta
trabajame de apuro arrimame una manera de mirarme que me encauterice
poneme frenético dale gravidame como nunca pudieron o como pudieron cuando yo no podía
No me embauqués cuando no sea tu propósito hacerlo desprestigiame de a poco ante mí prestigiame de golpe tropezate conmigo una vez que después siempre. *
Quiero y quererte
Te quiero para todo (salí a quererte donde se pudiera) aunque el ángel se haya hecho pelota (arrepentido el domingo de haberse insinuado en francés el sábado a la noche) No es desde la alcoba de Dios que te grito mi azúcar manchada Ni ropero ni guitarra ni cantor la cama como siempre: ¡venceremos!
Cargá con tu cruz pero con más gracia a ver los hombros, las rodillas no escurras del escultor el embeleso Ondulo en el umbral una rapsodia de recibimiento no te doy permiso para huir me río con todos los dientes te cierro con llave te guiño con la chimenea que ya empieza a concebir un humo raro
Vení a sacarme el moho y la camisa y por favor el nudo en la garganta. *
De tango
Me dejaste por otro aunque el otro no existía cuando me dejaste por otro
Me dejaste por otro, aunque el otro no existía cuando me dejaste por otro
Me dejaste por otro, aunque el otro no existía cuando me dejaste por otro
Me dejaste por otro, aunque el otro no existía Cuando me dejaste por otro, el otro no existía
Por qué me dejaste mi linda Juliana tu nene es un pájaro de fuego mojado. *
La dexyuprilora Ella se descubrió su midada de gaba en una foco su miyada de gala en una foro su mimada de gafa en una fofo su mitada de garra de una fobo su mixada de gaxa en una foxo ella se descubrió
Ella se descubrió su mifada de gaja en una fogo su migada de gaga en una folo su minada de gana en una fono su mipada de gaña en una foño ella se descubrió
Sí
Ella se descubrió su mirada de gata en una foto. * La musa merodeadora “Yo tan sólo veinte años tenía” Enrique Cadícamo
Hablamos largamente en la plaza de sus creencias, de mi incredulidad a qué me dedicaba y qué quería ser -un levante común el mío, sin sospechar- y qué nombre le puso a su hijito y por dónde vivía ella de Nicolás Olivari, más tarde entre polvo y polvo lavándose
Yo tan sólo veinte años tendría y no aflojó -mi segunda puta aquella merodeadora del Once-:
le tuve que pagar. *
Ánima
Su suave cadáver se me apareció tres meses orlada de geranios
y me cebaba un amargo espumoso la finada. * Chiste Calcaré sin maestría un chiste por si las nupcias
Posareme como pata de galgo sobre la escritura invisible de tu tinta ilesa
Voy a hacer que mi estancia en ésta te conmueva voy a cabalgar un caballo cáustico que únicamente me traiga de regreso
Arrojareme invadido por un atroz romanticismo pulmonar a las secas aguas de la borra ilustre de tu vino grueso
Voy a sacar mi pobre reloj de la bañera no sea que el tiempo se moje en serio y que la pólvora. * La raíz
Ella se propuso incendiarme el camino contrastar la roca y el silencio bordear el horizonte con sus rulos y trinos desbrozar la soledad y el sol eléctrico
Yo dispuse sus manos sobre toda la herida de mi látigo terco ahondé la claridad la oscuridad la decidida inicial de su cuerpo
Ella se deslizó como la gota plena como una fiebre verde y bienvenida como un reloj de arena o como arena y extendida
Yo sepulté la racha de la umbrosa constelación de pájaros y lenguas unté sus manos otra vez su rosa constituí en ausencia
No se puede vivir con tanta muerte ni morir ni se sabe qué hacer con la sed y con el hambre donde ponemos la agonía algo no cabe
Otro pájaro o el mismo incrusto su pico en la única raíz. *
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