Está loco. No sabe. Pero lo intentó. Anota lo anotado con precisión certera, pues quizá el escritor extraterrestre lo haga con lucidez o como Lucifer, aunque se imagine a posteriori ese paisaje real o irreal que desconoce, tendrá que describir, con la letrística más veraz, cuando regrese a su destino, lugar. Empero. Tanto años he o ha vivido y aunque viniendo de observar y andar, se convierte en una experiencia privada y parecida a la de encontrarse de frente a ese monumental paisaje de paisaje desconocido, dando frutos solo que, “recordar es olvidar”, ello mueve el suspiro, asombro. Un Marciano jamás podrá escribir el olvido porque no ha vivido la realidad. Ese esta quedando loco o loca, Pues cree es una figura inmortal o bronce invisible, aunque se muestra refractario (a) a la escoria, pero el gesto afable disfruta de ello como una flor de íntimos cumplidos. En el vergel de la sapiencia, ¿serán valores que se imponen? Como maldita envidia, egoísmo preclaro y prestigioso para esos que creen tener su verdad, a través del sacrosanto en andar indisponiendo a los demás, ¿y qué no se fijan? Que son viles destructores a ustedes mismo los devorarán con fecunda virtud inspirada en vil pluma, tintero y papel, esa es la mampara. Pero vive la esperanza desplegada en la conciencia, pero de buena fe.
|