Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Opinión
Etiquetas | Fallas | Valencia | Respeto | Empatía | Animales | Tradiciones | Autismo | Planeta

​Fallas y problemática

Es el momento de evolucionar y dejar a un lado las tradiciones tan dañinas con los animales, el planeta y las propias personas
Diego Nevado Martínez
sábado, 15 de marzo de 2025, 12:07 h (CET)

IMG 20250315 103751


Un año más, la fiesta de las Fallas es la excusa perfecta para el incivismo que ya estamos viendo estos días por las calles de Valencia y pueblos, pese a que la gente, como bien manifiesta por redes sociales, no está para fiestas después de que el desastre climático que nos llevó a la DANA haya destrozado todo a su paso en muchas zonas que todavía están por recuperarse y cuyas familias siguen esperando ayuda de la administración.


Sin duda, cada vez más gente toma conciencia del daño que ocasiona la pirotecnia o de lo innecesaria que es la tortura y humillación pública de los animales que tendrá lugar en la plaza de toros de Valencia, parasitando un año más las Fallas.


Inmersos también en una grave crisis climática provocada por las actividades humanas, debemos tener en cuenta el gran impacto medioambiental de la pirotecnia y de la quema de fallas.


Por seguir con el tema de la pirotecnia, la diversión y la adrenalina no pueden estar por encima de los derechos de los animales que conviven como miembros de la familia en nuestras casas, personas con autismo, bebés, ancianos, personas con enfermedades, la fauna o la grave crisis climática que atravesamos.


Una de las primeras cosas que destaca la bióloga de la plataforma Defensa Animal, Rosa Mas, es el contexto que envuelve la pirotecnia hoy en día. Este contexto lo ejemplifica situándolo en su Valencia natal, donde es algo “totalmente normalizado”.


En Valencia, al igual que en otros muchos lugares, los niños crecen con petardos como un elemento más. Cuando los niños tienen una mínima edad, empiezan a utilizarlos y se convierten en “algo con lo que se crece aquí y que se asocia siempre a la celebración. Hay que celebrar algo: petardos”, señala la bióloga en una entrevista con Lanza Digital.


Lo primero que produce la pirotecnia es un ruido repentino. Este ruido, explica al citado medio, provoca reacciones de pánico y angustia, que se traducen en dificultades respiratorias, aumento de la frecuencia respiratoria y cardíaca, y que incluso puede causar la muerte.


«Se han dado casos de animales que han huido despavoridos. Perros, por ejemplo, en sus casas al oír los petardos no podían soportarlos y han acabado muertos tras lanzarse al vacío, saltar vallas muy altas o quedar estrangulados en algún tipo de reja», denuncia la bióloga.


«Hasta ahora, solamente habíamos tenido en cuenta que a algunas personas podía resultarles divertido, pero no hemos considerado a otras criaturas con las que convivimos, no solo animales, sino personas con alta sensibilidad, como aquellas dentro del espectro autista», aclara.


ANTEPONER LA DIVERSIÓN A LOS DERECHOS DE LOS DEMÁS


"Tenemos que valorar si la diversión que provoca un espectáculo pirotécnico vale la pena cuando estamos causando la muerte de animales. Es frecuente ver animales muertos después de estos eventos porque han sufrido una parada cardíaca. Si estamos evolucionando y adquiriendo conocimientos antes desconocidos sobre estos efectos, no podemos seguir actuando de la misma manera. De lo contrario, de nada sirve la investigación y el conocimiento adquirido", valora Mas.


Rosa Mas propone soluciones imaginativas, como ocurre en Castellón, donde se llevó a cabo un espectáculo con hologramas, lo que representa una alternativa viable.


«Estos espectáculos proyectan imágenes en tres dimensiones, acompañadas de música, evitando el estruendo de la pirotecnia. Es decir, sí existen opciones para evitar causar estos daños».


Además de los daños a los animales y a las personas con alta sensibilidad, también se debe considerar el impacto ambiental. La pirotecnia utiliza sustancias como el perclorato, un contaminante reactivo que se usa para disparar los cohetes y que permanece en el aire, pudiendo afectar la tiroides humana.


Asimismo, los metales pesados utilizados para dar color a los petardos (rojo, azul, etc.) quedan como contaminantes en el medioambiente. Una vez explotado el cohete, las cenizas y partículas resultantes permanecen en el aire como aerosoles contaminantes. Además, los residuos sólidos de los petardos, como los casquillos y el papel, contaminan los alrededores del espectáculo.


Por lo tanto, lo mínimo que se debe hacer es dejar de utilizar pirotecnia y que esos empresarios reciban las ayudas correspondientes para reconvertir el sector.


Igualmente, quemar fallas es insostenible y dañino para la fauna, además de que gran parte de las mismas suele contener diferentes plásticos, como ha ocurrido en diferentes colegios donde las fallas ya han sido quemadas.


También es frecuente montar carpas pegadas a la fachada de colegios que luego acaban llenos de basura en el patio cuando vuelven los niños a clase.


Aunque en su día las Fallas me gustaban, valorar los efectos dañinos que causan ha hecho que me produzcan rechazo, más en la situación de grave crisis climática que estamos viviendo, con fenómenos cada vez más peligrosos y que cada vez serán peores si no cambiamos rápido nuestros hábitos, especialmente sustituyendo desde ya los productos de origen animal por proteína vegetal, pues las Fallas también suelen ser la excusa perfecta para darse “atracones” sin miramiento.


Por ejemplo, la horchata, que es muy famosa y típica de Valencia, es de origen vegetal, al igual que dulces típicos de las Fallas como los churros, buñuelos o porras, pero los de chocolate e incluso el propio chocolate también se podrían hacer con bebida vegetal y no con leche de una vaca lactante, separada de sus hijos, inseminada una y otra vez por la fuerza, encerrada, manipulada genéticamente y sacrificada en un matadero cuando ya no puede más.


FB IMG 1740207969131


TORTURA EN LA PLAZA


El Partido Animalista PACMA y la organización internacional PETA han puesto en marcha una campaña de protesta contra la tauromaquia durante las Fallas de Valencia, haciendo circular un camión con pantallas LED por las principales calles de la ciudad durante este fin de semana.


FB IMG 1713711153195


El diseño del cartel muestra una comparación de un torero matando a un toro y un bombero rescatando a una niña, acompañado del mensaje «¿A dónde quieres que vayan tus impuestos?».


La iniciativa busca generar un debate público sobre la inversión de dinero público en la tauromaquia, cuestionando la legitimidad de seguir subvencionando espectáculos basados en el maltrato animal mientras se reducen recursos en servicios esenciales como el de bomberos, un hecho especialmente grave tras la catástrofe de la #DANA en Valencia, donde se evidenció la falta de recursos para atender emergencias y proteger vidas humanas y animales.


CONCLUSIONES: DEBEMOS CAMBIAR NUESTRAS DIVERSIONES


Nadie dice que no tengamos que divertirnos, pero todas las tradiciones y formas de diversión obsoletas y dañinas deben sustituirse por otras, educando a las futuras generaciones o esto ya no tiene fin.


Como ya hemos comprobado, la mayoría de los políticos no van a hacer nada por ti, es el momento de que actúes tú en lo que puedes y debes hacer.


¿Qué se puede esperar, por ejemplo, de una Generalitat Valenciana que mantiene al indecente y negligente Carlos Mazón o ha tenido de vicepresidente a un torero?


La crisis climática, con catástrofes que estamos sufriendo, cada vez será peor, y mientras tanto la pirotecnia, la quema de fallas y la industria de explotación animal siguen aumentando la contaminación mientras la gente se divierte sin pensar.


Partiendo de la base de que las tradiciones lo que deben hacer es evolucionar, es más que necesario que hoy mismo dejes de apoyar a la industria que explota animales y optes por disfrutar de manera compasiva mediante alternativas vegetales.


FB IMG 1739747758881


La educación en valores antiespecistas y en la verdadera sostenibilidad es algo primordial para poder tener un futuro más digno.


Por lo tanto, es el momento de evolucionar y dejar a un lado las tradiciones tan dañinas con los animales, el planeta y las propias personas en las que no pensamos, salvo si nos toca de cerca. Esto es una cuestión de respeto y empatía.

Noticias relacionadas

En el documental '7291' se denuncia que "solo se derivó desde las residencias de Madrid a los hospitales a quienes tenían seguros privados" y que "se podrían haber salvado 4.000 vidas si no se hubieran aplicado criterios discriminatorios por razón de renta", con lo que Ayuso sería culpable de homicidio negligente penado con 10 a 15 años de cárcel.

Un año más, la fiesta de las Fallas es la excusa perfecta para el incivismo que ya estamos viendo estos días por las calles de Valencia y pueblos, pese a que la gente, como bien manifiesta por redes sociales, no está para fiestas después de que el desastre climático que nos llevó a la DANA haya destrozado todo a su paso en muchas zonas que todavía están por recuperarse y cuyas familias siguen esperando ayuda de la administración.


Pocas veces o ninguna como ahora ha estado tan dividido el espectro político en España. Si nos atenemos al principio de «divide y vencerás», esta fragmentación puede hacer que la situación se vuelva ingobernable por mucho tiempo, es decir, tras unas cuantas elecciones generales, y la razón de ello es que no se han sabido gestionar las mayorías suficientes.

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© 2025 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© 2025 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto