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Transitamos por un tiempo donde la racionalidad del siglo XX está en crisis. En el campo de la comunicación y la política, ciertos términos como “Estado”, “mercado”, “público” y “privado” han sufrido erosiones. ¿Qué significa hoy recordar los antiguos argumentos que se desplazaban entre supuestas certezas de identidad y una cultura política? ¿Cómo transitar entre las finanzas y la legitimidad en la construcción social de relatos y territorios?
Sabe lo que son; se lo explicaron y, lo peor de todo, es que le da igual abrazarles, compartir mitin y retratarse con ellos para la posteridad. Parece que en la cruzada contra el socialismo y los 'colectivistas' todo vale, incluso darte abrazos de oso con lo mas granado del populismo nacionalista conservador de Occidente.
La vida no es como una caja de bombones. La frase de Forrest Gump, tan famosa (¿?), presupone un mundo feliz en el que no hay bombones rellenos de hiel. Sin embargo, el propio Gump debe saber que no es así en cuanto su vida no es precisamente afortunada.
Es conocida la posición de Ayuso contra las drogas. El PP y en general los conservadores siempre lo estuvieron. Los que albergasen la esperanza de que la gran defensora de la libertad tuviera una postura algo más liberal en este tema, que la pierdan por completo.
«Nadie tiene intención de construir un muro en Berlín», esas fueron las palabras que pronunció Walter Ulbricht, jefe de Estado de la República Democrática Alemana (RDA), solo un mes antes de ordenar la construcción del «telón de acero», dividiendo, de la noche a la mañana, familias enteras entre una zona del Berlín occidental con el Berlín oriental.
Hace apenas tres años era solo un deslenguado economista que se hacía hueco a base de virales en la red. Hoy es el presidente electo de Argentina. Javier Milei tiene ante sí un doble reto fabuloso; por un lado, reconstruir la destrozada economía de su país; por otro, confrontar el liberalismo ante otras ideologías dominantes hoy en el mundo.
¿Cómo hacer para que las ideologías no absoluticen el poder, sino que pongan en el centro a a la persona? El liberalismo prioriza la libertad personal pero si no lo armoniza con el principio de la igualdad se convierte en capitalismo salvaje; el socialismo prioriza la igualdad, pero si impide el crecimiento económico de las personas y su libertad, se convierte en un régimen de muchos que pueden vivir pero no se crea riqueza (Cuba, Venezuela, la antigua URSS...).
El desarrollo de la economía convencional tal como hoy la conocemos, ha sido en parte debido a la promoción del modelo social de los siglos XIX y XX, sustentado en la tabla del crecimiento únicamente material y tecnológico que sostienen las sociedades occidentales.
El cisne no canta nunca, grazna. En la historia hay una leyenda, que recoge Virgilio y da cuenta de algo inaudito: El cisne, como predicción de su propia muerte, canta. En Grecia el hecho mereció la atención de Esopo (fábula el Cisne y el Ganso), Esquilo (en Agamenon), Sócrates, Platón y Aristóteles.
Las derechas y los políticos inmorales usan, abusan y hacen mucho ruido mediático para sembrar el caos y denigrar al adversario hasta convertirlo en caricatura cosificada y esperpéntica o animal burlesco. El discurso de la confusión impide la reflexión pausada y el diálogo mediante argumentos.
Claro que éste ha sido un “Orgullo” politizado, como lo son cada una de las decisiones. La ideología política impregna nuestras vidas y empapa nuestras entrañas: desde la decisión de madrugar para agolparse en un vagón atestado de más transeúntes o madrugar para anegar las carreteras con coches y respirar aire negro y nocivo. Tampoco el “Orgullo” se escapa de esta liza ideológica que nos tensiona a diario.
Debemos volver a repetir aquella vieja frase cuando un horizonte oscuro se alzaba sobre Europa, “No pasarán”, precisamente en el contexto de la Guerra Civil Española. Ningún término es tan usado a la ligera como el que se compone de la palabra fascismo.
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