| ||||||||||||||||||||||
Correos ha admitido más de 2,6 millones de solicitudes de voto por correo de cara a las elecciones generales que se celebrarán el próximo 23 de julio. En concreto, la compañía postal ha recibido 2.622.808 solicitudes de voto por correo, de las cuales 1.924.976 se han presentado de forma presencial en la red de oficinas postales y 697.832 de forma telemática a través de la web de Correos.
El próximo domingo 23 tenemos una cita con las urnas, unos acudirán, otros, en un puro ejercicio de pasotismo preferirán la playa o la montaña en lugar de ejercer un deber ciudadano, y también habrá quienes, después de meditar y estudiar las propuestas de los distintos partidos políticos, preferirán la abstención pensando que con esta personal opción están castigando a aquellos partidos que no han cumplido con sus promesas electorales.
En su día, los capitalistas modernos resucitaron un sucedáneo de la democracia a la que aplicaron el calificativo de representativa, actualizando así el sistema de gobernabilidad en los países agremiados por el interés del dinero, permitiendo que con él terciara simbólicamente la ciudadanía a través del voto. Fue una jugada bien diseñada, porque nadie podía quejarse de que luego los elegidos actuaran a su aire, puesto que representaban la voluntad popular.
El 3 de julio de 1979 la Sala de lo Contencioso-Administrativo de la Audiencia Nacional anuló, mediante sentencia hecha pública, la resolución de la Dirección General de Política Interior del 7 de febrero que declaró ilegal a la Asociación Grande Oriente Español (Masonería Española Simbólica Regular). Desde entonces los masones españoles, ya podían inscribirse en el Registro Nacional de Asociaciones y ser una asociación legal.
La autocrítica es el fetiche del espacio progresista que a lo largo de la historia ha sido utilizado cada vez que se produce un batacazo electoral en el mismo. Pero ¿aprendemos algo o simplemente es postureo? El votante progresista requiere estar motivado para movilizarse, requiere de un proyecto que ilusione y mueva sus sentimientos para acudir a las urnas.
Siempre he tenido la duda de que la suma sea buena “per se”. ¿Por qué la duda? Porque la unión no es un axioma de fuerza y victoria; sencillamente porque la fuerza y la victoria dependen de los sumandos..., y no, simplemente, del signo “+”.
Mal empieza los mítines el presidente con eso de «compañeros y compañeras». Tal especificación no procede en este caso y, además, es cansino con una fuerte carga de hartazgo. Me enerva cada vez que escucho la estupidez esa de «compañeros y compañeras», «concejales y concejalas» o «vikingos y vikingas», como leo en un libro de texto.
No debe estar muy contento el secretario nacional del partido sanchista oscuro-embaucador con las últimas noticias que salen por los rincones de toda España. Y le está muy bien empleado porque al final todo se sabe, aunque dispongan de la máquina de mentir más poderosa que la Inteligencia Artificial.
Me he quedado con las ganas. Pensé que podría comprar votos para el PSOE de Castilla y León y después revendérselos a Luis Tudanca por un pico. Pero, no. Resulta que Castilla y León es más seria de lo que nos creíamos: en esta tierra no se compran votos en elecciones, si acaso botos camperos, pero de ahí a imitar a la mafia del «Sanchismo» hay un buen tramo.
¡¡Manolo, tú vas a ser Alcalde de Mojácar el próximo 28 de mayo!!, proféticas palabras del inefable Félix Bolaños que, reaparecido después de su mermada salud por los “sucesos” del 2 de Mayo, se ha convertido en un cooperador necesario para la más que previsible derrota electoral de su partido.
He oído la expresión con la que titulo este artículo docenas de veces, pero nunca en boca de alguien rico o con ideas de derechas. No digo que no haya ricos que digan eso, sino que a quien yo oigo decir que no vale la pena ir a votar es a gente que vive al día o malvive o que no es de derechas.
Como Sierra Morena, famosa por sus bandoleros de película, hoy tenemos la fronteriza Melilla y la mediterránea Mojácar haciendo pinitos de bandolerismo electoral. Ladronzuelos de poca monta, salvo lo que de trasfondo lleva consigo el “engaño a las urnas democráticas de todo un Estado”.
INDRA es nuestra y es la llave maestra ('Partido Socialosta monclovita', no obrero, no español = sanchismo). Pero hay que disimularlo a todo lo largo y ancho de la España votadora. Montamos tómbolas falsas por todas partes y el ruido apaga la música, la palabra, las señales, los indicios, los arreglos y todo lo demás.
¿Van a votar a un partido cuyo fundador justificó ya en su primera intervención parlamentaria el atentado personal a un compañero de hemiciclo (aunque no resultó letal, el ataque se produjo); que durante la Segunda República estaba obsesionado con ir a la confrontación civil (cosa que acabó consiguiendo, para encima perderla); que intentó un golpe de estado durante la misma (mil quinientos muertos)...
Según el CIS, un 30% de los electores decidirán esta última semana. Estamos en la semana de la reflexión. Dice Enric Juliana que “si el 30% espera a la última semana, ahora empieza la campaña electoral de verdad. Quedan siete días para fijar posiciones”. Entonces hagamos lo debido, reflexionemos y fijemos posiciones, para animar a los demás a que hagan lo mismo.
El pasado viernes se dio el pistoletazo de salida a las elecciones del 28-M, pero la realidad es que hace semanas que el ambiente ya se había caldeado ante la proximidad del último domingo de mayo, fecha marcada en rojo por todos los aspirantes a ocupar un puesto en los ayuntamientos o en los parlamentos autonómicos.
Los hispanos “los de abundantes refranes” (nos llamaría Homero), los tenemos para todo y también para cualquier ocasión. Quien lo ponga en duda que inquiera en el Quijote y comprobará la abundancia de ellos que tenía el cazurro Sancho, aplicables a cada momento y, en ocasiones, aunque no viniesen a cuento.
En la República del Paraguay, La Concertación es el gran ejercicio democrático que se lleva adelante desde el 18 de diciembre (2022), demostró a todo el país cuáles son los ideales que forman la unión: la paz entre los paraguayos y las paraguayas de bien y el deseo de un cambio en la economía de la nación guaraní.
Estos días de precampaña de elecciones autonómicas y municipales, dicen que son días para la reflexión “mitinera”, días de decoración atrasada, días de promesas de paraísos terrenales, días de conquista de la nueva juventud ignorante...
En las campañas electorales, los ciudadanos más responsables suelen limitarse a leer los programas de los principales partidos. Los más irresponsables se dejan llevar por la última impresión recibida en la barra del bar. Se podrá decir que en ella se reúnen parroquianos con intereses afines. Pero eso sería uniformar excesivamente las clases sociales, que no existen (no lo dudamos) pero que haberlas haylas.
|