| ||||||||||||||||||||||
Los votos y el apoyo a la formación política Junts per Catalunya son los votos del espanto, y la triste realidad es que muchos catalanes compran sus mentiras. Los catalanes ya sabemos cómo gobiernan estos de Puigdemont y compañía, pero por lo visto hay personas que les gusta ser engañados.
Cataluña formaba parte del Reino de Aragón en la Edad Media. El condado de Barcelona se unió al Reino de Aragón en 1137 mediante el matrimonio de Ramón Berenguer, conde de Barcelona y Petronila de Aragón. Con el tiempo, Cataluña fue desarrollando una identidad cultural y política propia dentro de la Corona de Aragón, pero siempre estuvo vinculada a la monarquía aragonesa y posteriormente a la monarquía española, tras la unión de los Reyes Católicos en 1469.
Contra los agoreros que desde hace un tiempo vienen proclamando la muerte del independentismo o su domesticación, como hacen Pedro Sánchez y sus ministros, la celebración el pasado miércoles, una vez más, de la Diada de Catalunya sirvió para acallar a aquellos que llevan un tiempo entonando música de réquiem por el independentismo.
De jovencitos todos soñamos con llegar a ser... con alcanzar el éxito.... con conseguir el poder... Si alguien se riera de esos sueños, era suficiente para negarle la amistad presente y futura. Las personas se enfrentan por sus pasiones y los sueños son, precisamente, esas pasiones interiores; menospreciarlas, supone despreciar lo único de valor que cualquier persona libre lleva en su interior.
Hoy quiero hablaros del payaso, cobarde y defenestrado Carlos Puigdemont. Hace un par de días lo vi claramente por televisión; no recuerdo en qué cadena. Quiso dar testimonio visual de que había regresado a su ilegal refugio de Waterloo, después de jugar un ratito al gato y al ratón con la canalla catalana lamiéndole sus miserias separatistas; y la rotunda complicidad delictiva de unos componentes de los “mozos de cuadra”, que muy pronto serán condecorados debidamente.
Como siempre que escribo sobre Cataluña y/o los catalanes, trato de ser justo, riguroso y objetivo; por ello nunca se me olvida destacar que en aquella región hay muchísima gente con los mismos sentimientos que en el resto de España respecto a la unidad, solidaridad y la igualdad de todos los españoles.
La alegría futbolística no ha sido bien recibida por independentistas ni por Otegui, dice que no se siente identificado ni por España, ni por el rey, ni por el himno, ni la bandera. Yo me pregunto ¿Si tan a disgusto está por qué no se marcha a otro país? Y los separatistas que también dicen lo mismo, ¿por qué no hacen lo propio?
¡Ya está aquí!, ¡ya llego!; ¡qué placer!, ¡qué ilusión! Son las palabras festivas que se han escuchado en ambientes separatistas catalanes con motivo de la vuelta a España de Marta Rovira ¡¡Pues va a ser que no!! Esta delincuente y traidora no puede ser bien recibida en esta noble nación, porque siendo española (aunque reniegue de ello) se fugó cobardemente tras los acontecimientos en los que intervino como eficaz protagonista de traición a la patria.
¡Ni los más viejos del lugar se lo creerían! Un golpista catalán, Josep Rull, nacido como yo en Terrassa (Barcelona), y que ha estado en prisión por el golpe de Estado separatista en octubre de 2017, está presidiendo el Parlament de Catalunya, en teoría una institución democrática, pero que en la práctica esa democracia, y en muchas ocasiones, brilla por su ausencia.
El problema catalán lleva ya demasiado tiempo enquistado, y eso es una pésima noticia. Desde el sector secesionista se quejan de las casi nulas aportaciones del Estado a su utópica e irrisoria República catalana: ¿qué más quieren los estafadores y golpistas independentistas catalanes?
Creo que por mi cargo público durante un tiempo, estoy en condiciones de opinar sobre el actual independentismo catalán. Sabemos que el actual nacionalismo catalán no es constitucionalista, es independentista, ¿pero lo fue la antigua Convergència? Argumento mi posición al respecto.
Decía Muñoz Molina en su libro 'Todo lo que era sólido' «que los nacionalistas vivan subyugados por las mitologías patrióticas de origen y por la obsesión de la pureza es comprensible. Que la izquierda no solo las apoye, en cuanto se le presenta la ocasión, sino que además los imite en cada uno de sus devaneos y se esfuerce en ir todavía más lejos es un enigma que, por cansancio, ya he renunciado a explicarme».
Desde el martes pasado, los jueces y tribunales tienen dos meses para aplicar esa brutal injusticia que llaman Ley de Amnistía. Tal plazo quedará paralizado si se eleva cualquier cuestión prejudicial al TJUE (Tribunal de Justicia de la Unión Europea). Puedo garantizar, y así lo hago, que cualquier español serio se avergonzará de gran parte del contenido a medida que avance en su lectura.
Desde tiempos de Felipe V, España siempre ha estado intentado mantener callados a los catalanes, y cuando el 1-O más de dos millones de ellos de forma pacífica votaron favorablemente una propuesta de República e independencia, desde Madrid les enviaron la policía española a apalearlos, y a los jueces, la Brigada Aranzadi, para, con unas especiales interpretaciones de la legislación, acallar las voces disidentes del pueblo catalán.
Esta frase la encontramos en el “De Amicitia” (Sobre la Amistad), escrito por Marco Tulio Cicerón, y con ella quiere decir que “los iguales con mucha facilidad de unen a sus iguales”. En Español tenemos un refrán casi idéntico que es “Dime con quién andas y te diré quién eres”.
Fango: Vilipendio, degradación, lodo hecho con residuos térreos donde hay agua detenida. Muro: Pared, tapia, cerca o muralla. ‘Cordón sanitario’: Acuerdo entre partidos políticos para aislar a otro y evitar que llegue al poder o prevenir la expansión de una ideología.
En 2007, cuando José Luis Rodríguez Zapatero finalizaba su primera legislatura, empezó a cuajar en la sociedad catalana una sensación de cansancio y disgusto. Los problemas crónicos en Cercanías, un aeropuerto que entonces era insuficiente para responder a la proyección de Barcelona, la baja inversión pública por parte del Estado o el acentuado déficit fiscal acabaron por engendrar lo que se bautizó como el 'català emprenyat' (catalán enfadado).
El próximo domingo, 12 de mayo, los catalanes acudirán a las urnas para elegir quién tendrá que dirigir la Generalitat. No es fácil predecir cuál será el resultado de unas elecciones en las que el independentismo puede perder la primacía que ha alcanzado durante los últimos años.
Y así es. De pronto oigo truenos en el cielo y aquello que eran suposiciones mal intencionadas se convierten en realidades. Escucho en los noticieros que los que han mostrado su mayor oposición a prostituir la separación de poderes con indultos y amnistías a la carta, el PP, resulta que ahora estarían dispuestos a dar el indulto a Puigdemont. Con condiciones según ellos.
Palabras emitidas, como un eructo mental por este hombre que, para nuestra desdicha, nos gobierna. Mire Vd., Pedro Sánchez, tampoco el terrorismo es independentismo. Estas palabras son dos conceptos que de por si no indican nada. Son las personas independistas o terroristas quienes son peligrosas. Los que, cuando fanáticamente, ponen en práctica estos conceptos, son violentos.
|